Coeur de cuisine

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Coeur de cuisine - Corazón de cocina

miércoles, 21 de marzo de 2012

Lentejas con trigo especiales

Desde que compramos en casa trigo, lo uso a menudo. A veces para ensalada y otras para legumbres, en sustitución del arroz.
Siempre se ha recomendado comer legumbres junto con arroz para que se absorban mejor las proteínas de éstas.


Sé que para muchos es raro tomarlas con arroz; las típicas lentejas son con chorizo y más o menos caldosas, a veces con alguna rodajita de zanahoria y normalmente con una patata.

En casa nunca hemos comido lentejas sin arroz ni zanahoria; con patata, que yo recuerde, ninguna; y con chorizo, muy de vez en cuando.


Me encantan las legumbres, y como no, lo oriental y lo marroquí, y por eso he reinventado estas lentejas, con cúrcuma y Ras El Hanout. Son dos especias que no faltan en mi casa desde hace al menos 10 años, quizás más...


Normalmente cuando me hago lentejas, suelo tener fritada hecha, con pimientos tricolor, pero últimamente les han subido mucho el precio y sinceramente, sólo por tener pimiento amarillo no merece la pena (¡aunque me encanta!). Así que ésta vez he optado por ponerle sólo pimiento verde, zanahoria y cebolla, ¡y tomate frito claro!


Los ingredientes son para dos personas (en el plato está servida sólo la cantidad para una y poquito más), o una… Una con mucho apetito jejej

Ingredientes:
-un bote de lentejas cocidas de 295 gr (podéis usar lentejas sin cocer, alrededor de 200 gr)
-3 cucharadas colmadas de trigo sin cocer
-3 tazas de agua y un poco más
-sal
-2 cucharadas de aceite
-4 cucharadas de tomate triturado
-1 cucharada colmada de tomate concentrado
-media cebollita francesa
-un trozo de pimiento verde
-un trozo de zanahoria
-una pizca de Ras El Hanout (o en su defecto Garam Masala)
-una pizca de cúrcuma


Primero, y con tiempo, dejamos en una tacita el trigo con agua hasta arriba, ya que absorbe mucho y rápido. Dejamos que absorba entre 2 y 3 horas.


Pasado este tiempo escurrimos el trigo y en otro colador dejamos escurriendo las lentejas.

Ponemos una cazuela con dos tazas de agua y una pizca de sal, a hervir. Cuando rompa a hervir vertemos el trigo y dejamos cocer 5 minutos, y escurrimos.



En la misma cazuela haremos todo. Ponemos dos cucharadas de aceite con la cebolla muy picada y dejamos pochar un poco. Antes de que esté del todo pochada, bajamos el fuego al mínimo, añadimos el tomate triturado, con una pizca de sal y media taza de agua; removemos.


Al cabo de unos 5 minutos, añadimos la zanahoria (en sustitución del azúcar para regular la acidez del tomate), y el tomate concentrado; el pimiento verde un par de minutos después. Podéis añadirlos antes de este tiempo; en mi caso, me gusta que las verduritas estén algo duritas y que crujan, pero si lo preferís menos crujientes, añadirlo junto con la cebolla, para que tenga más tiempo de cocción.

En definitiva, el tomate tiene que estar al menos unos 10 minutos haciéndose.

Tras este tiempo vertemos la media tacita de agua restante, las lentejas y el trigo, y removemos. Añadimos la cúrcuma y el Ras El Hanout volviendo a remover. Dejamos al fuego durante 10 o 15 minutos.


Por último sólo queda sentarse a la mesa y disfrutar.


Si las queréis más caldosas, sólo tenéis que añadir más agua hasta encontrar el punto deseado; tras los 10 o 15 minutos habrá reducido un poco más.

sábado, 10 de marzo de 2012

Arepas venezolanas


Las arepas es una comida típica de Venezuela que se suele comer a diario para desayunar o bien para acompañar las caraotas (judías negras) o en el pabellón criollo.


Marilia, mi querida canaria, mi compañera de cocina con la que comparto casi 24 horas al día, las hizo el día de su cumpleaños, en honor a los 7 primeros años de su vida que vivió en Venezuela. Me gustaron tanto que las hice en casa en cuanto pude y nos gustaron mucho.


En palabras de Marilia:

La verdad es que las arepas han estado siempre presentes en mi vida en la mesa de mi casa.
Me recuerdan siempre a buenos momentos: asocio las arepas a buenos momentos, nunca te decepcionan.

Es un plato sencillo en lo que a la arepa se refiere, ahora bien, las puedes rellenar de mil maneras y te las puedes comer tanto a la plancha como fritas. Cuando las haces fritas hay que atravesarlas por el centro con la punta del dedo. Nosotros aprovechamos y cuando las hacemos fritas hacemos palitos y bolitas que pasamos por la mantequilla… Mmmm está delicioso :)!


 En cuanto a los rellenos: caraotas es lo común. También las puedes rellenar con carne mechada, sardinas en tomate, queso y jamón, aguacate con tomate y cebolla, chicharro, huevo frito, huevos de codorniz con salsa rosa, queso Guayanés… Y el favorito de las hermanas Betancor, aunque suene raro: atún con salsa rosa.


En fin, de las arepas decir que hay que rellenarlas bastante y comer muchas para saber comerlas sin mancharse y como un auténtico venezolano jeje.



Una cosa si te voy a decir, cuando mejor saben las arepas es en un día de verano después de salir del agua y agotado: una buena arepa con su buen relleno, malta y unos tostones (plátano frito) y tan a gusto que te quedas”.



Marilia también me cuenta que recuerda con cariño y humor a su prima Margarita que comía en competición con su hermana hasta 8 arepas de una sola vez… ¡¡Con tan sólo seis añitos!!


Tras las palabras de Marilia y volviendo a la receta… La harina P.A.N. que se usa en las arepas que hemos hecho es la del paquete amarillo, no el naranja que es más seca, aunque también se hacen con ella. Se encuentra en cualquier supermercado, así que no os costará encontrarla.

Ingredientes:

-harina P.A.N.
-agua

Las cantidades exactas y la elaboración vienen dadas por el fabricante por detrás del paquete. Lo único que creo que debo explicar es cómo hacer para que queden bien redonditas.




Si las queréis de tamaño pequeñito, se trata de coger un poco de la masa y hacer unas bolas no muy grandes (aunque lo parezca en las fotos, son pequeñitas). 


Si por el contrario las queréis más grandes, tendréis que coger más masa.
Después, vamos aplastando las bolitas contra las manos, como si les diésemos palmadas, pasándonoslas de una mano a otra.


Se ponen en la sartén o en la plancha sin aceite. Y se dejan dorar poco a poco a fuego medio alto, luego se va bajando.



En mi caso, hice las pequeñitas e hice la mitad de la receta que ponía el fabricante, y salieron alrededor de 12.



Como comenta Marilia, el relleno es muy versátil, se pueden rellenar de cualquier cosa. En su cumpleaños las hizo que queso y jamón y de maíz con atún y mayonesa (su relleno favorito como veis en la foto). Además, como dice arriba, se pueden hacer fritas o a la plancha. 





También podéis apreciar la experiencia que tienen en comerlas por la gran cantidad de relleno que lleva la suya... jajaja La mía a su lado está poquito rellena.



En mi caso no las he probado fritas, aunque es una cosa que tenemos pendiente por hacer una tarde de estas, pero deben estar riquísimas también por lo que me cuenta. 


Os dejo lmuchas de as fotos que ella me mandó cuando las hizo en su casa.



Como veis en las fotos, mis rellenos fueron de:
-carne picada con ciruelas y piñones,
-lechuga con tomate y aguacate
-jamón y queso Raclette 





Si os sobran, no pasa nada, se pueden recalentar tanto en la sartén como en el microondas, en éste último os quedarán un poquito más húmedas y es más recomendable porque en la sartén quedan más secas.


Espero que os guste esta receta y que no dudéis en probarla pronto. 

miércoles, 7 de marzo de 2012

Bizcocho de naranja


No soy una experta, y no tengo conocimientos académicos de formación en cocina, tan sólo os presento lo que cocino, lo que como cada día, invenciones, sueños que dan resultados increíbles…


El jueves me propusieron mis compañeros de clase cocinar con ellos, y para ellos, y se me ocurrió hacer una lasaña doble (que quiero dejaros pronto) y un postre; el postre, fuera el que fuera, tenía que llevar naranja, ya que uno de mis compañeros tenía bastantes; que por cierto, nos dio la bienvenida con un estupendo zumo recién exprimido.

Inspirada en una receta de un bizcocho de naranja que vi no hace mucho, hice ésta otra, que modifiqué por completo sobre la marcha. Es un bizcocho muy muy esponjoso, de hecho al comerlo se oye como si fuera una esponjita!


Y el resultado… Espectacular. Desapareció la bandeja entera en un abrir y cerrar de ojos. De hecho, y nunca mejor dicho, a uno de mis compañeros, no llegamos a verle comérselo, más que el primer bocado… Luego quería robarnos al resto que estábamos saboreándolo despacito… jajaja!

Ayer la volví a repetir y la han vuelto a probar, y al iugal que yo, dicen que está más buena que la del jueves, y no es más que por el aumento de la cantidad de ralladura de naranja y la disminución de la de harina.


Ingredientes:
-95 gr harina y un poco más para el molde
-90 gr de azúcar moreno
-1 cucharadita colmada de azúcar vainillado
-1 cucharadita colmada de levadura
-el zumo de una naranja con su pulpa y su ralladura
-2 huevos
-55 gr de mantequilla derretida y un poco más para untar el molde


Precalentar el horno a 190º.

Primero untamos con mantequilla y harina el molde, y retiramos el exceso de harina.

Mezclamos los huevos con el azúcar y el azúcar vainillado.


Añadimos la mantequilla derretida, el zumo, la pulpa y la ralladura de la naranja, y mezclamos.

A continuación tamizamos la harina y la levadura, y removemos.


Horneamos durante unos 15 minutos, revisamos haciendo la prueba del palito.


Mientras está caliente pasamos la puntita de un cuchillo por los bordes para despegarlo y dejamos enfriar 5 minutos dentro del molde.


Recomiendo servir acompañado de un té aromático.

martes, 6 de marzo de 2012

Coffee-cake

Una de las muchas tardes en las que me pego a la tele viendo recetas, vi a Annie hacer este estupendo bizcocho para el café, un coffee-cake excelente (aunque también está muy bueno con un buen té Earl Grey).



Es un pelín laborioso, pero francamente, reconozco que merece la pena enfrascarse y probarlo, os quedaréis con las ganas de más.

Es un bizcocho esponjoso, sabroso y con un intenso sabor a canela que no deja indiferente a nadie, os lo recomiendo.


La receta original la podéis encontrar en su recetario de CanalCocina, yo la modifiqué sólo un poquito en cuanto a ingredientes y la preparación es diferente también.


Ingredientes:
- 100 g de mantequilla
- 180 g de azúcar extrafino *
- 2 huevos batidos
- 1 cucharadita de extracto de vainilla o una cucharada de azúcar vainillado
- 285  g de harina
- ½ cucharadita de levadura en polvo
- 1 cucharadita de bicarbonato
- ½ cucharadita de sal
- un yogur natural (puede ser desnatado)
- nueces picadas al gusto

* se puede usar 30 gr de azúcar blanquilla y 120 de azúcar moreno
 


Para el relleno:
80 g de azúcar extrafino
1 cucharadita colmada de canela


Precalentamos el horno a 175˚C.

Untamos un molde desmoldable con mantequilla y harina. En mi caso elegí uno redondo con agujero en el medio, como le llamo yo.

Batimos los huevos junto con el extracto de vainilla.



Añadimos la mantequilla y mezclamos con las varillas eléctricas. Agregamos el yogur y el azúcar, y volvemos a mezclar con las varillas eléctricas.



Tamizamos la harina con la levadura en polvo, el bicarbonato y la sal y lo incorporamos poco a poco a la mezcla.



En un vasito ponemos la canela y el azúcar para el relleno.



En el molde ponemos las nueces (para que se vean al desmoldarlo). 




Después ponemos la mitad de la masa sobre ellas y cubrimos con la mitad de la mezcla de azúcar y canela. 




Volvemos a cubrir con el resto de la masa.  




Con un cuchillo, jaspeamos la masa, como si la estuviésemos cortando. 






Por último, tapamos un poco los huecos que hayan quedado y volvemos a espolvorear con el resto de azúcar y canela.


Horneamos unos 35-40 minutos.



Dejamos enfriar antes de cortar.