Siento la
tardanza y siento que la Semana Santa, para hacer torrijas, ya se haya pasado,
y es que no he tenido mucho tiempo; pero nunca es tarde y siempre queda algún
cachito de pan que se puede aprovechar en toda época del año.
Estas
torrijas, aunque sencillas y tradicionales, llevan un toque especial, que
apenas se nota, pero que hacen que salgan deliciosas.
En Semana
Santa las hice tres días porque estaban deliciosas…
Así que
para todos los que os animéis aprobarlas con ese pan olvidado de antes de ayer,
os dejo esta maravillosa receta.
Ingredientes:
-una y
media de pan de antes de ayer
-medio
litro de leche
-una rama
de canela
-piel de
un limón (quitando por completo la parte blanca porque amarga)
-dos
cucharadas de azúcar
-una
cucharadita de postre de agua de azahar
-una
cucharadita de canela en polvo
-5 huevos
-aceite de
oliva suave
Para
espolvorear:
-4
cucharadas de azúcar extrafino
-1
cucharadita de postre de canela en polvo
En una
cazuela vertemos la leche junto con el azúcar, la rama de canela, la piel del
limón y removemos. Dejamos calentar pero sin que llegue a hervir la leche,
habrá que remover y vigilar a menudo.
Mientras
vamos cortando rebanadas de al menos 1cm de ancho. A mí me gusta cortarlas al
bies, quedan mucho más bonitas y más grandes.
Retiramos
la leche después de unos 10 o 15 minutos y dejamos enfriar durante al menos 5
minutos. En cuanto enfríe, añadimos el agua de azahar.
Ponemos a
calentar a una sartén grande aceite suficiente para freír.
A
continuación, colocamos una rejilla con una bandeja debajo y con la ayuda de
una espumadera sumergimos, una a una, las rebanadas de pan dándoles una o dos
vueltas y sacándolas sobre la rejilla para que escurran el sobrante.
En un
cuenco o en un bol, ponemos los huevos y batimos enérgicamente.
Tras haber
escurrido todo el sobrante, se pasan por huevo y se fríen.
Una vez
fritas por ambos lados, las ponemos en un plato con papel absorbente para
retirar el exceso de aceite.
Después
las ponemos en una bandeja y espolvoreamos con canela y azúcar al gusto.
12 comentarios:
Habrá que probar esta versión de las torrijas, tiene muy buena pinta!
Te han quedado buenísimas me encantan!!!
Mil besos.
Desde luego que la pinta y la presentacion ,no puede ser mas perfecta, me han encantado. Un besico
cosicasdulces.blogspot.com
Son deliciosas siempre, da igual la fecha. Yo siempre hago un roscón en Agosto, ya es casi tradición!! ;)
¡torrijas, qué ricas! Yo también hice en semana Santa. Pero me da miedo lo de ponerles agua de azahar, mis chicos son tan raritos...
besotes
no hace falta que sea semana santa para comerse estas torrijas!
Cualquier día es bueno para estar torrijas!!
petonets
Me encantan estas torrijas a tu manera¡¡¡
Siempre apetecen unas torrijitas!. Al menos a mí!!!!
Encantada de saludarte couer de cuisine!!!!
Por cierto, anímate a participar en el concurso de cocina al vapor!!!
Hola! Que blog mas bonito! He estado mirando tus entradas y me han gustado mucho, hasta en una he visto como eres :-) que joven!,! Jajja no es que yo no lo sea, pero no tanto :-) . Encantada de conocerte, y por cierto, es genial que no haya días senyalados para la cocina, así que me llevo una torrija tuya para el desayuno. Un besito y gracias por venir a verme.
Me encantan, qué ganitas de una buena torrija.Debería estar prohibido hacerlas sólo en Semana Santa ¿ A ver por qué no podemos disfrutarlas todo el año? Si sobra pan...Torrijas, a comer!!!
siempre es momento de comerse una torrija asi, que ricas!!
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